“El Problema del Recuerdo y su Olvidada respuesta”
En estos días la idea de progreso más el padecer de las personas que sufren su vida, se ha tatuado tan profundamente en el “Ser Humano” que ha hecho o ha caricaturizado el pasado como existentes, resumiéndolo en la falacia “el pasado es escencia del presente”, entonces nos queda analizar y reflexionare sobre la excesiva consecuencia de la vida con lo olvidado.
Cuando hablamos de recuerdo nos entrometemos con complicadas palabras que nos hacen inmediatamente blanco obligado de las sospechas y dudas de los centenares de siglos que llevan estos conceptos: el tiempo y aquel que predica del tiempo.
Por esta razón es que es necesario aclarar qué es el tiempo y para esta respuesta me apoyo en San Agustín, quien creo fue el más lucido en predicar sobre éste (tiempo). Él nos dice que el tiempo no es más que puro presente y que las ingenuas afirmaciones del pasado y el futuro no son innecesarias y contingentes (que no hay razón para que exista mas que para que no exista), porque en la espacio-temporalidad lo realmente existente es la situacionalidad del presente y sus supuestos correlatos, el pasado y el futuro son solo pensamientos o mas bien dicho, siguiendo las líneas del autor “recuerdo y esperanza” respectivamente. Luego de esta aclaración necesaria con respecto del tiempo podemos seguir avanzando.
Luego de esta guía, es necesario que hablemos del que contiene y puede hacer juicios del tiempo y ese es el Hombre, éste quien le da existencia al tiempo, y esto revela la clara importancia que tiene en cuanto al tiempo.
El hombre, la medida de todas las cosas, como es medida, también es medido por otro, padece o hace padecer. Con esto lo que se quiere decir y dándole el énfasis que amerita, el hombre en su construcción espacio-temporal sufre y lamenta la vida, y de esto nos da cuenta la historia, de que hay quienes han sido lastimados en su eterno presente y como él es quien predica y decide que es lo que se predica, como también de si, es que alcanzamos a ver una complejo problema.
Ya sabemos bien que la vida o existencia es complicada y a algunos los complica más y como el hombre es quien decide sobre si, también decide sobre el tiempo y con este poder hace lo mejor que sabe hacer que es “esconder lo vivido y hacer consecuente su vida con lo olvidado, esforzando el presente para hacerlo padecer por el pasado”. A lo que me refiero con ese enunciado es que la respuesta del hombre ante los problemas es solucionado por medio de la memoria, es decir que la facultad de recordar el pasado y manejarlo es propia de la memoria, de la memoria del presente, es decir que se intenta con todo el esfuerzo y ahínco de olvidar y estar en un “olvidando” constante, es decir que el presente esta súper editado al pasado, porque esta en función de éste que lastima, es por esto que podemos decir que la solución del hombre ante el sufrimiento es hacer mas tormentoso ese sufrimiento, ya que si se viviese el dolor no se estaría viviendo en el pasado, porque el dolor es presente, como única condición posible del hombre en el tiempo, y lo que se cree como superado no es más que hacer que el hombre pierda su condición de sujeto espacio-temporal, situación que lo hace existente, es por esto que, como ya sabemos el grave problema que hace el sufrimiento en el hombre, creo que nos queda preguntarnos ¿debemos vivir en función del pasado haciendo consecuente nuestra vida con lo olvidado o es nuestro pasado el sustrato de nuestro presente?.
Concluir que en estos tiempos es difícil llevar la vida y que cada vez complican más la existencia y que hacen padecer al hombre una angustia, no hay gran novedad e investigación en eso, pero lo que se quiere anunciar en este escrito es que el excesivo huir de los problemas o excluirse de lo que es la vida, trae como consecuencia un problema mayor que el problema mismo, por la actitud que comportan las personas aproblemadas, que es el escape existencial, ya que se escapa de la verdadera existencia que es la situada y se cambia de actitud comprometiendo su situación presente por que todo su ser espacio-temporal se pierde por vivir en el olvido y hacer consecuente su existencia con lo que se esta olvidando.
el problema del recuerdo
En estos días la idea de progreso más el padecer de las personas que sufren su vida, se ha tatuado tan profundamente en el “Ser Humano” que ha hecho o ha caricaturizado el pasado como existentes, resumiéndolo en la falacia “el pasado es escencia del presente”, entonces nos queda analizar y reflexionare sobre la excesiva consecuencia de la vida con lo olvidado.
Cuando hablamos de recuerdo nos entrometemos con complicadas palabras que nos hacen inmediatamente blanco obligado de las sospechas y dudas de los centenares de siglos que llevan estos conceptos: el tiempo y aquel que predica del tiempo.
Por esta razón es que es necesario aclarar qué es el tiempo y para esta respuesta me apoyo en San Agustín, quien creo fue el más lucido en predicar sobre éste (tiempo). Él nos dice que el tiempo no es más que puro presente y que las ingenuas afirmaciones del pasado y el futuro no son innecesarias y contingentes (que no hay razón para que exista mas que para que no exista), porque en la espacio-temporalidad lo realmente existente es la situacionalidad del presente y sus supuestos correlatos, el pasado y el futuro son solo pensamientos o mas bien dicho, siguiendo las líneas del autor “recuerdo y esperanza” respectivamente. Luego de esta aclaración necesaria con respecto del tiempo podemos seguir avanzando.
Luego de esta guía, es necesario que hablemos del que contiene y puede hacer juicios del tiempo y ese es el Hombre, éste quien le da existencia al tiempo, y esto revela la clara importancia que tiene en cuanto al tiempo.
El hombre, la medida de todas las cosas, como es medida, también es medido por otro, padece o hace padecer. Con esto lo que se quiere decir y dándole el énfasis que amerita, el hombre en su construcción espacio-temporal sufre y lamenta la vida, y de esto nos da cuenta la historia, de que hay quienes han sido lastimados en su eterno presente y como él es quien predica y decide que es lo que se predica, como también de si, es que alcanzamos a ver una complejo problema.
Ya sabemos bien que la vida o existencia es complicada y a algunos los complica más y como el hombre es quien decide sobre si, también decide sobre el tiempo y con este poder hace lo mejor que sabe hacer que es “esconder lo vivido y hacer consecuente su vida con lo olvidado, esforzando el presente para hacerlo padecer por el pasado”. A lo que me refiero con ese enunciado es que la respuesta del hombre ante los problemas es solucionado por medio de la memoria, es decir que la facultad de recordar el pasado y manejarlo es propia de la memoria, de la memoria del presente, es decir que se intenta con todo el esfuerzo y ahínco de olvidar y estar en un “olvidando” constante, es decir que el presente esta súper editado al pasado, porque esta en función de éste que lastima, es por esto que podemos decir que la solución del hombre ante el sufrimiento es hacer mas tormentoso ese sufrimiento, ya que si se viviese el dolor no se estaría viviendo en el pasado, porque el dolor es presente, como única condición posible del hombre en el tiempo, y lo que se cree como superado no es más que hacer que el hombre pierda su condición de sujeto espacio-temporal, situación que lo hace existente, es por esto que, como ya sabemos el grave problema que hace el sufrimiento en el hombre, creo que nos queda preguntarnos ¿debemos vivir en función del pasado haciendo consecuente nuestra vida con lo olvidado o es nuestro pasado el sustrato de nuestro presente?.
Concluir que en estos tiempos es difícil llevar la vida y que cada vez complican más la existencia y que hacen padecer al hombre una angustia, no hay gran novedad e investigación en eso, pero lo que se quiere anunciar en este escrito es que el excesivo huir de los problemas o excluirse de lo que es la vida, trae como consecuencia un problema mayor que el problema mismo, por la actitud que comportan las personas aproblemadas, que es el escape existencial, ya que se escapa de la verdadera existencia que es la situada y se cambia de actitud comprometiendo su situación presente por que todo su ser espacio-temporal se pierde por vivir en el olvido y hacer consecuente su existencia con lo que se esta olvidando.
el problema del recuerdo